La Armadura Mark X fue el décimo traje de Iron Man de Tony Stark. Formó parte de la Legión de Hierro, y fue destruido por el protocolo "Cleanslate" activado por Tony Stark.
Historia
La Mark X fue llamada, junto con el resto de la Legión de Hierro, para ayudar a Tony Stark y a James Rhodes a luchar durante la Batalla en el Norco contra Aldrich Killian y sus soldados Extremis. Durante el transcurso de la batalla una serie de armaduras fueron destruidas, aunque finalmente éstos lograron eliminar a todos los soldados Extremis. Al final, todos los trajes restantes fueron destruidos cuando Stark activó el protocolo "Cleanslate".[1]